miércoles, 15 de octubre de 2014

COMO PROCEDER EN LOS TIEMPOS PRESENTES.

Estamos viviendo en medio de los tiempos profetizados por nuestro Señor Jesucristo en los que la ausencia del amor al prójimo y la maldad se han multiplicado en gran manera.
Dice nuestro Señor Jesucristo:

“Por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.”
Mateo 24:12

Estamos viviendo así como en los días de Noé, cuando el continuo pensamiento del ser humano era de continuo al mal...

“Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal”.
Génesis 6:5

“Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia.”
Génesis 6:11

Es justamente la radiografía de cada una de nuestras sociedades a lo largo de todo el mundo. Estaría de más demostrarlo, pues lo estamos viendo.
Nosotros como cristianos hemos de estar conscientes que las cosas no están bien y que por lo tanto nuestro protagonismo en medio de este mundo oscuro es urgente. Es nuestro deber preservar de la maldad el entorno que nos rodea y  alumbrar las tinieblas que nos circundan. Al respecto nuestro Señor Jesucristo nos dice:

“Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que están los cielos.”
Mateo 5:13-16

Pero...

¿En realidad estamos preservando nuestro entorno de la maldad y estamos alumbrando como nos corresponde? 
He aquí cuatro actitudes que hemos de tener en cuenta en estos tiempos tan difíciles que estamos atravesando.
Veamos cada una de ellas:

Cultivar nuestra vida espiritual por medio de la oración y la reflexión bíblica.


Apegar nuestro estilo de vida a los principios cristianos, con el propósito de ser punto de referencia para los demás.


Proponerse cada día en transmitir la Palabra de Dios por medio de los recursos que tenemos a nuestro alcance.


Obrar a favor del prójimo anteponiendo nuestros intereses personales.


Si siendo cristianos no tenemos en cuenta estos 4 principios, no estamos en nada. Estamos desperdiciando nuestra vida y recursos en medio de un mundo que cada vez se pudre más en la maldad...

Por medio de esta reflexión, Dios te está dando la oportunidad para que reorientes tu vida de acuerdo al propósito por el cual te ha creado...




José Alfredo Liévano
Twitter.  @JAlfredoLievano  


No hay comentarios: